Ben & Jerry's se fundó en 1978; Unilever tiene más de 400 marcas que incluyen Dove, Hellmann's y Knorr.
Ben & Jerry’s y Unilever, buscan una mediación en la disputada venta del negocio israelí a un licenciatario local en Cisjordania ocupada.
Bajo el argumento de que socavaría su marca y su «integridad social», Ben & Jerry’s se opone a vender sus productos en Cisjordania ocupada. Sin embargo, en una carta fechada el jueves, un abogado de la firma originaria de Vermont dijo que las compañías querían «intentar resolver su disputa» con una mediación formal acelerada. Lo anterior en lugar de litigar.
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Cabe recordar que la mayoría de los países consideran ilegales los asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada. La decisión de Ben & Jerry en julio pasado de poner fin a sus ventas ahí y sus vínculos con Zinger llevaron a que grupos judíos acusaran a la compañía de antisemitismo.
La carta se presentó 20 minutos antes de una audiencia programada sobre el asunto en la corte federal de Manhattan. El 5 de julio se presento una demanda para bloquear la venta del negocio a Avi Zinger, diciendo que Unilever había garantizado a Ben & Jerry’s el derecho a proteger su marca.
Sin embargo, Unilever respondió que estaba «totalmente facultado» para realizar la venta y que Ben & Jerry’s no podía mostrar un daño irreparable. De acuerdo con la firma, prolongar el estancamiento podría exponer más a ambas compañías.