Cuesta de enero: Qué hacer y qué no hacer para mantener tu salud financiera
Enero suele ser un mes difícil para las finanzas de muchas personas. Tras los gastos de diciembre y el aumento de precios y tarifas al comenzar el año, lo que se conoce como la cuesta de enero, el presupuesto familiar puede sentirse más ajustado de lo esperado. Esto incluye tanto los gastos de las fiestas como los pagos habituales de principios de año, que pueden afectar tu poder de compra si no los planeas con tiempo.
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¿Qué es la cuesta de enero?
La cuesta de enero es la presión económica que muchas personas sienten después de gastar en regalos, viajes y celebraciones en diciembre, sumado a los aumentos de precios y tarifas de servicios al empezar el año.
En enero también hay que hacer pagos extra, como colegiaturas, impuestos y otros compromisos que muchas veces no se planean con tiempo. Todo esto hace que el inicio de año sea especialmente difícil en lo económico.
¿Qué hacer durante la cuesta de enero?
Para salir adelante en este periodo sin afectar tus metas financieras, es importante adoptar hábitos que te ayuden a ser disciplinado y controlar tus gastos:
Revisa y ajusta tu presupuesto personal
Registra cada uno de tus ingresos y compáralos con tus gastos habituales, incluidos los gastos extra de principios de año. Pon lo más importante al principio para priorizarlo, como la comida, la vivienda y los servicios básicos, antes de pensar en otros gastos.
Controla tus gastos y prioriza las necesidades
Identifica qué gastos son necesarios y cuáles pueden esperar. Revisar en qué has gastado últimamente te ayuda a comparar tus gastos con tus ingresos actuales y tomar mejores decisiones.
Evita endeudarte más de lo necesario
Aunque puede ser tentador usar la tarjeta de crédito o pedir préstamos para cubrir los gastos de enero, es mejor limitar su uso para no complicar tus finanzas en los próximos meses.
Ahorra con anticipación para eventos futuros
Una de las lecciones más importantes de la cuesta de enero es anticipar los gastos. Si ahorras durante el año, puedes evitar que diciembre y enero sean una carga financiera mayor a la que tu presupuesto puede manejar.
Considera ingresos adicionales temporalmente
Si puedes, buscar ingresos extra, como trabajos o proyectos temporales, puede ayudarte a aliviar la presión financiera sin afectar tu dinero del mes.
¿Qué no hacer (y por qué evitarlo)?
Evitar algunas prácticas durante la cuesta de enero puede cuidar tu salud financiera y prevenir problemas más grandes:
No postergar el registro de tus gastos
No saber cuánto ni en qué gastas dificulta entender tu situación financiera. Anotar cada gasto te ayuda a identificar patrones y eliminar lo que no es necesario.
No incrementar tus deudas sin un plan claro
Pedir dinero prestado para pagar deudas anteriores o compras recientes puede ser riesgoso si no tienes un plan claro para hacerlo.
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