La compañía busca adaptarse a la situación de pedidos.
Bosch reveló la necesidad de un recorte hasta 1,500 puestos de trabajo en dos de sus plantas alemanas para ajustarse a las transformaciones en la demanda y tecnologías en el sector automovilístico. Esta medida busca adaptarse a los desafíos actuales y anticipar futuros cambios.
La decisión de Bosch responde a la necesidad de alinear el personal con los cambios estructurales en el sector automotriz y la evolución de las tecnologías. La compañía busca adaptarse a la situación de pedidos y penetración en el mercado de tecnologías futuras.
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Bosch planea lograr el recorte de empleos mediante diversas estrategias, como traslados internos, jubilaciones anticipadas y acuerdos de despido voluntario. El enfoque se centra en las áreas de desarrollo, administración y ventas en las plantas de Feuerbach y Schwieberdingen.
La empresa está en conversaciones con el comité de empresa para definir detalles específicos de la adaptación laboral. La intención es buscar soluciones que minimicen el impacto social, considerando opciones como traslados y acuerdos voluntarios.
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