Llamó la atención del multimillonario fundador de Virgin Group, Richard Branson.
En noviembre de 2013, un emprendedor llamado Jamie Siminoff apareció en el programa de TV Shark Tank para lanzar su producto: Doorbot, un timbre-video con WiFi que sincroniza con el teléfono inteligente del usuario para ver quién estaba llamando a su puerta en tiempo real.
Solo uno de los Shark Tank’s, Kevin O’leary, hizo una oferta. Consistió en un préstamo a cambio del 10% de las ventas hasta pagar el préstamo y el 7% de todas las ventas a partir de ese momento, más un 5% de participación en la compañía. Consciente de su innovadora idea, Jamie Siminoff rechazó la oferta.
Después de hacerle un cambio estético a la marca y rebautizar como Ring, el timbre de Jamie comenzó a venderse en Best Buy, Home Depot, Target y muchas otras grandes tiendas.
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Revuelo e innovación
Gracias a las primeras ganancias, Siminoff instauró el equipo de timbre-video con una función de prevención de robo que permitía a los usuarios fingir que estaban en casa cuando en realidad no era así.
Jamie Siminoff llamó la atención del multimillonario fundador de Virgin Group, Richard Branson, quien quedó impresionado después de ver a un invitado en su isla privada utilizando Ring para verificar que su casa estuviese en perfecto estado desde miles de kilómetros de distancia en una isla paradisíaca.
Así fue como Brandon invirtió un aproximado de 2.7 millones de euros a Ring, convirtiéndose en uno de los grandes inversores que pronto recibiría 162.5 millones de euros de la compañía.
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Los alcances
Jamie Siminoff estudió emprendimiento en Babson College donde aprendió a desafiar el status quo. En la universidad estuvo rodeado de personas de ideas afines, donde los profesores crean un ambiente propicio para los futuros empresarios.
En sus años como estudiante ganó un concurso de planificación comercial y comenzó a escribir planes comerciales para otros. Hasta que finalmente, lanzó su propio emprendimiento.
Cinco años después de presentar su producto en Shark Tank, donde fue rechazado, en 2018 regresó al programa para participar como jurado.
Asumiendo que Jamie Siminoff logró mantener un 30% de su compañía, su patrimonio neto hoy en día subió a la increíble cifra de entre $360 y $540 millones.
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