SAT podría multarte por transferencias de familiares o amigos
Hoy en día, conforme el dinero electrónico gana terreno sobre el efectivo, es muy común hacer depósitos entre familiares y amigos. Ya sea para dividir una cuenta o realizar un préstamo personal, estas transferencias, como todas las demás, están monitoreadas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Sin embargo, no todos los depósitos deben ser declarados ante la institución. Aquí te explicamos si las transferencias a familiares o amigos podrían generarte una multa de hasta $35,000 pesos por parte del SAT.
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¿Todas las transferencias podrían darme una multa?
Aunque suene alarmante, no todas las transferencias que recibas deben declararse como ingreso. El SAT únicamente sancionará aquellas transferencias que superen los $600,000 pesos. Incluso si el dinero proviene de un familiar o amigo cercano, es fundamental recordar que, al rebasar ese monto, debe ser declarado. No importa si la cantidad se entrega en efectivo o por transferencia electrónica: la operación debe incluirse en una declaración fiscal. Mantener tus obligaciones en orden evitará problemas futuros y mantendrá tu historial bancario en regla.
¿Cómo puedo declarar mis transferencias?
El SAT cuenta con la Forma 86-A, destinada a reportar préstamos, aportaciones para futuros aumentos de capital o incrementos de capital recibidos en efectivo, ya sea en pesos o en moneda extranjera. Si tienes previsto recibir, o ya recibiste, un préstamo o aporte mayor a $600,000 pesos, lo mejor es presentar a tiempo la Forma 86-A. Con este trámite podrás librarte de sanciones y asegurar que tu situación fiscal permanezca en cumplimiento con la normativa vigente.
Este documento requiere datos como:
- Información del contribuyente que recibe los recursos.
- Datos del prestamista (nombre, RFC y domicilio).
- Monto total recibido.
- Fecha de la operación.
¿Por qué debo informar al SAT sobre mis movimientos personales?
Para mantenerte en regla con la administración de tus impuestos, es necesario que tus movimientos bancarios sean transparentes ante la autoridad fiscal. Al revisar tus cuentas, el SAT no puede distinguir si una transferencia es ingreso laboral o un préstamo personal. Esta obligación nace de la necesidad de claridad sobre los ingresos, especialmente cuando rebasan ciertos límites establecidos por ley.
Aunque las transferencias entre familiares o amigos son comunes, es fundamental conocer los límites establecidos por el SAT para evitar sanciones. Declarar operaciones superiores a $600,000 pesos mediante la Forma 86-A no sólo es una obligación, sino una forma de mantener tu situación fiscal en orden. La transparencia financiera es clave para evitar multas y complicaciones futuras.