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Alan Turing, un genio condenado por su orientación sexual

junio 20, 2022   |  
Alan Turing, un genio condenado por su orientación sexual
Alan Turing, un genio condenado por su orientación sexual

El código enigma es una película basada en su trabajo para descifrar los códigos nazis.

Nacido el 23 de junio de 1912 en Londres, Reino Unido, en el seno de una familia de clase media alta, Alan Mathison Turing se convirtió en un matemático sobresaliente, filósofo, botánico, criptógrafo e informático teórico. Juzgado por sus preferencias sexuales y en medio de una fuerte depresión, se quitó la vida luego de ofrecer grandes aportaciones a su país.

Con tan solo 26 años, Alan Turing comenzó a trabajar para el servicio oficial británico como especialista en criptología. Gracias a que inventó la máquina electromecánica Bombe, los Aliados lograron descifrar los códigos nazis, producidos por Enigma, en la Segunda Guerra Mundial.

Una carrera en ascenso

En 1939 nació “Bombe”, primera máquina precursora de las computadoras que conocemos actualmente. Su función consistía en traducir expresiones matemáticas, reducirlas a cadenas lógicas de números binarios y obtener dos tipos de respuestas: verdadero o falso.

Gracias a ella, Turing es considerado el padre de la informática moderna y de la inteligencia artificial; fue el primer matemático en plantear la relación entre máquina y materia.

En 1950 escribió un artículo titulado Computing machinery and intelligence (Inteligencia y mecánica computacional), en que cuestionó la capacidad de pensar de las máquinas. Su planteamiento fue tan innovador que se desarrolló el Test de Turing, para medir la capacidad de las máquinas para hacerse pasar por un humano.

Entre los reconocimiento oficiales que obtuvo por su trabajo y servicio a la patria están:

  • Premio Smith 1936
  • Oficial de la Orden del Imperio Británico en 1946
  • Miembro de la Royal Society en 1951

La condena de Turing

Sin embargo, un año después de ese último reconocimiento, cuando la monarquía británica reparó en su homosexualidad, se le denegó el acceso a las instalaciones de la base militar de Bletchley Park, donde laboraba y se le hizo escoger entre la castración química o la cárcel.

Turing optó por la primera opción y como efecto secundario derivó en una profunda depresión que lo llevó a quitarse la vida el 7 de junio de 1954. Para lograr su cometido, mordió una manzana envenenada con cianuro. Dicha teoría fue confirmada hasta 2012, por Jack Copleand, historiador y director del Archivo Turing de la Historia de la Computación.

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