Abrir una franquicia puede ser una buena forma de invertir y generar ingresos adicionales. Sin embargo, no siempre todo sale como uno espera y, a veces, hay que tomar decisiones difíciles. Si necesitas cerrar tu franquicia, aquí te explicamos qué hacer.
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Paso 1: Revisa el contrato y condiciones de término
El primer paso, que te servirá para planear lo que sigue, es revisar bien el contrato de franquicia. Ahí se indican las razones por las que puedes terminar el acuerdo, las obligaciones que quedan pendientes, los plazos de aviso y las posibles penalizaciones por terminar antes de tiempo.
En caso de que la cláusula de salida no permita una terminación unilateral o anticipada sin penalización, cerrar la franquicia sin seguir el procedimiento adecuado podría generar obligaciones legales o económicas significativas, que podrían perjudicarte más que beneficiarte.
Paso 2: Tramitar legalmente la terminación del contrato
Para cerrar la franquicia de forma legal, avisa por escrito al franquiciante y respeta los plazos de aviso que marca el contrato.
En muchos casos, lo mejor es llegar a un acuerdo con el franquiciante para evitar penalizaciones, sobre todo si el contrato tiene condiciones muy estrictas.
Si decides terminar porque el franquiciante no cumple, por ejemplo, si no te da apoyo, no respeta cláusulas importantes, hay problemas de territorio o no cumple lo prometido, podrías tener una razón legal para terminar sin penalización.
Es muy importante contar con asesoría legal especializada en franquicias. Así podrás entender el contrato, preparar la carta de terminación, documentar todo el proceso y proteger tus derechos.
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Paso 3: Liquidaciones, inventario y obligaciones económicas

Cerrar una franquicia implica resolver varios temas financieros: pagar deudas, saldar regalías atrasadas, saldar penalizaciones, liquidar inventarios, cancelar contratos de proveedores, arrendamientos o servicios, y cumplir con las obligaciones fiscales y laborales.
Haz una lista detallada de tus activos, bienes, licencias, equipos y contratos de arrendamiento para evitar sorpresas. Si tienes empleados, toma en cuenta las obligaciones laborales al despedirlos; aspectos como liquidaciones podrían ser un gasto significativo que desembolsar antes de cerrar.
Paso 4: Opciones alternativas: venta o traspaso de la franquicia
Terminar con la franquicia no siempre significa dar por perdido el esfuerzo que le habías puesto. Si el contrato lo permite, podrías venderla o traspasarla a otra persona. Así reducirías tus pérdidas y recuperarías parte de tu inversión.
En algunos casos, el franquiciante puede recomprar el negocio o ayudarte a transferirlo a otra persona interesada. Esta opción suele ser más sencilla y puede evitar penalizaciones por cerrar de forma repentina.
¿Cuáles son los riesgos de cerrar una franquicia?
Si cierras una franquicia sin cumplir el contrato o sin avisar de forma oficial, puedes enfrentar sanciones, indemnizaciones, demandas, pagos futuros o incluso perder tu inversión inicial. Además, si tomas esta decisión sin una estrategia clara, puedes dañar tu reputación, perder oportunidades de negocio en el futuro y enfrentar problemas legales durante más tiempo.
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